sábado, 28 de junio de 2008

La insensatez de Mariano Rajoy

Cuando un partido político está en la oposición debe actuar como tal oposición, pero sin tremendismo y sin engañar a los ciudadanos. Desde hace pocas fechas veíamos en Rajoy un nuevo talante de oposición pero -creíamos- nada mentirosa como a la que estábamos habituados en la legislatura anterior. Sin embargo nuestro gozo en un pozo: ha comenzado a mentir como en él es habitual [y como aprendió muy bien del tal Aznar]; dice que España está sufriendo la peor crisis de toda su historia. Desde luego Rajoy sabrá mucho de leyes aplicadas al comercio, pero de historia no sabe nada. O sí sabe mucho y cree que los ciudadanos españoles somos tontos y no sabemos nada. Desde los Reyes Católicos hasta el dictador Franco -con escasísimas excepciones- siempre mandó en España la derecha intransigente y en 1959 España estaba al borde de la bancarrota por lo que tuvo el dictador que abrir las fronteras. El ciudadano español ha estado siempre dominado por un grupito de derechas y le fue muy mal a España. A comienzos de la década de 1980 y hasta 1996 gozó España de la época más democrática y de reformas más importantes de toda su historia, con gobiernos democráticos de centro.izquierda.
Desde 1996 a 2004 gobernó la derecha. Tenemos en la memoria muchos acontecimientos nefastos para todos los españoles. Solo voy a referir dos: la Guerra de Irak y la Masacre de Atocha.

domingo, 1 de junio de 2008

Después de la victoria del 9 de marzo en las elecciones generales me tomé un descanso, aunque seguí interesado en las noticias y en la actuación política del nuevo gobierno y de la oposición. La composición del nuevo gobierno se configuró con una serie de personas, especialmente Carmen Chacó, que imprimieron un nuevo perfil al mismo. En contrapartida, la oposición se perdió en los problemas internos y volvió a no aportar nada positivo a la gobernabilidad de España, como hizo en la última legislatura. Deseo al PP que supere este mal momento y consiga asentarse para realizar una oposición constructiva por el bien de los ciudadanos